Con el nuevo aumento de combustibles los fleteros aseguran que la actividad ya no es rentable
El domingo pasado la compañía de bandera nacional YPF subió un 2,5 por ciento el precio de sus naftas y un 1,75 por ciento el gas oil, debido al aumento del barril de petróleo y de los biocombustibles. Un día después, Shell la siguió con un incremento del 2,1 por ciento en promedio.
El alza en el valor de los combustibles, principal insumo del rubro logístico se suscitó a pesar de que el Gobierno Nacional incrementó el Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL) muy debajo de lo previsto. También, ocurrió en un contexto donde el precio de la divisa norteamericana está estable.
En el marco de este nuevo incremento, los transportistas del cereal, correo, gaseosas, materiales de la construcción y mudanzas, entre otros, alertan sobre la crisis de rentabilidad que afecta al sector.
“El 70 por ciento de la composición de un vehículo está a precio dólar. Por ello, cada vez que aumenta el valor de la divisa norteamericana se encarecen los vehículos y los insumos, impidiendo que podamos renovar nuestras maquinarias de trabajo”, explicó a Info BLANCO SOBRE NEGRO Fernando Curbelo, delegado gremial del Sindicato Único de Fleteros en la República Argentina (SI.UN.FLET.RA) en el Correo Argentino”.
El Gobierno Nacional aumentó el Impuesto a los Combustibles Líquidos, que se actualiza cada tres meses, en un 3,92 por ciento, pese a que había anunciado que lo haría en un 11 por ciento. La decisión del Poder Ejecutivo Nacional de moderar el aumento se dio para evitar una nueva escalada inflacionaria. De esta manera, el tributo varió de $ 9,94 a $ 10,33 por litro de nafta y de $ 6,13 a $ 6,37 por litro de gasoil.
“Además del combustible, que es el principal insumo de la actividad, hay que tener en cuenta el precio de los aceites, cubiertas, repuestos, filtros y plásticos. Si la inflación medida por el INDEC el año pasado fue del 48 por ciento, en el rubro fue del 60 como mínimo”, detalló Curbelo, que, además, aclaró: “La actividad ya no es rentable para algunos transportistas”.
El valor de los combustibles no sólo está determinado por el precio internacional del petróleo, sino, también, por el valor del dólar, los biocombustibles y los impuestos.
“Nuestros números están condicionados, también, por la alta presión impositiva del sector. El Estado es nuestro socio en las buenas y no en las malas”, concluyó el delegado gremial del sindicato que representa a los propietarios de camiones y camionetas que prestan servicios de transporte en las ramas de cereales, jugos, cemento, correo, y lácteos, entre otros rubros.
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